La peor semana de la vida: el uruguayo Marco Giorgi acumuló desventuras en California

Marco Giorgi, surfista profesional uruguayo de destacada carrera internacional, pasó por una racha de mala suerte que le impidió rendir l máximo en las payas de California, estados Unidos.

Giorgi viajó a Norteamérica para medirse en el 2022 Vans US Open of Surfing, un certamen competitivo Enel que, por razones ajenas a su voluntad y control, terminó dando demasiada ventaja.

Un súbito e inesperado problema de salud, sumado al extravío de su material de competición, se sumaron en el pero momento. Una vez pasado el mal momento, Giorgio lo contó todo en su cuenta de Instagram.

“Después de 4 vuelos, un atraso, un vuelo perdido y muchas horas de aeropuertos finalmente llegué a California. Cuando fui a buscar mis tablas, nada. pensé: ok, seguramente más tarde llegan. Al día siguiente ya medio estresado que mis tablas aún no habían llegado empecé a sentirme mal, dolores abdominales, dolor de cabeza y fiebre. pensé será Covid? hice un hisopado y dio negativo. ¿Y las tablas? nada... “, escribió

“Al día siguiente me desperté mucho peor, todo el día de cama, igual pensé: mañana seguro pasa. Día siguiente me desperté peor todavía fiebre, dolor de cabeza siniestra y dolor abdominal. Empiezo e pensar que podría ser ¿piedra en el riñón? ¿vesícula? Fue cuando empecé a hablar con mi seguro del banco, porque el seguro "barato" (900us) de la WSL - World Surf League- solo cubre algo si te lastimas en plena batería”, narró.

“Al cuarto día de dolor (un día antes de mi batería) resolví ir a la sala de emergencia del hospital más próximo. Me hicieron unos exámenes de sangre y tomografías en la cabeza y abdomen, pasé todo el día en el hospital. Felizmente no encontraron nada grave, pero no me supieron decir exactamente lo que era. Me dieron unos remedios y me mandaron para casa. Detalle: mis tablas todavía no habían llegado”, contó en la red social.

Ver esta publicación en Instagram

Una publicación compartida de Marco Giorgi (@marcogiorgisurf)

Eran 4 pm del día antes de mi batería y todavía no había surfeado en California y ni tablas tenía. Llame a Gian (team manager de las tablas Lost) y fui a la fábrica a ver si tenían alguna tabla para mí. Compré una tabla usada más o menos con mis medidas y acepté la situación”, prosiguió Giorgi. Por desgracia, la tabla y él no congeniaron.

“Al día siguiente, ya sintiéndome mejor entré al agua a probar la tabla y no me gustó. Dura, lenta pegada al agua, no funcionaba en aquellas condiciones de HB. Saliendo del agua, Yufu (team manager de las tablas Sharpeye) me vio la cara de que no me había gustado y resolvió ayudarme. Terminamos encontrando una tabla de Jesse Mendes, corrí al agua agarre 2 olitas e inmediatamente me pareció mejor que la otra. Todo esto y faltaban menos de 2 horas para mi batería”, continuó.

Por desgracia, su reciente trastorno de salud y la falta de sus tablas favoritas terminaron por ser demasiado obstáculo.

“Solo para estar acá son 2 mil dólares de pasaje, 500 de inscripción mas todo el resto y estaba a punto de competir con equipamiento prestado. Ya cansado después de 2 surfs en el sol de verano después de una semana de cama sin ver casi luz no hubo otra, 2 pares de 3 y poco fueron mis puntajes en la batería. No sucedió ningún milagro solo lo más probable”, expresó estoico.

“Ahora estoy intentando cambiar mi pasaje para volver a casa a ver a mi familia antes del próximo campeonato que empieza en Chile en 10 días. Postdata: mis tablas nunca llegaron”, concluyó.

No es la primera vez que la salud le Juega una mala pasada a Giorgi. En octubre del año pasado, una intervención quirúrgica impostergable lo radió de las olas.