Por Javier González
1. El lugar y los amigos
Anduve por Oahu, en el North Shore, y en Kawai, otra de las islas. En total estuve alrededor de un mes. El viaje increíble, todo fue saliendo paso a paso, al toque le agarrás la mano de dónde ir, qué picos surfear y ahí ya estás encaminado...
Estuve con un par de amigos, Cecil y Lucas Selby, y Martín Alzaga. Después, tuve la suerte en la isla de Kauai de caer en la casa de Leo "El Canijo", tremendo surfer uruguayo, quien me hizo entrar expreso al pico sin tener que preocuparme por el localismo.
2. Cultura de surfing
En el North Shore de Oahu me encontré con un nivel de surfing que incluye no solo los guachos que detonan, sino que olones de todo tipo, cultura surfista que te deja de cara, tablas que en Uruguay no vemos, enanos de 10 años volando para todos lados, en fin, la verdad del surfing. Muchos pensamos que acá por Maldonado y Rocha lo vivimos, pero la realidad es que están muy superiores a nosotros, impresiona. La onda del lugar... se vive y se respira surf.
3. El famoso "localismo"
La gente y el localismo... mmm... es complicado. Afuera del agua hay buena onda, generalmente están todos en la suya. Pero adentro del agua cambia la historia. Tenés dos tipos, el local y el surfista que está de viaje en la misma que vos. El local es una persona que respeta al igual que todos allá las reglas del surf, pero en el momento en que ve que alguien no lo hace, se le cambia la cara y dependiendo de su humor es que vas a ver lio o solo malas caras. Lo importante es respetarlos, es su lugar y hay olas para todos...
4. Las olas
Del North Shore volví surfeando casi todos los picos, menos alguno escondido por ahí. En Kauai el tema es más complicado, cuesta encontrarlas, ¡pero igual surfamos buenas!
¡Las olas no paran! Del mes hubo solo un día de olas de medio metrito, hay que saber encontrarlas. Lo más grande fue Sunset. Se venían unos paredones cargados de agua que sin duda te movían el cuerpo cada vez que te tocaba comer... La ola que más me impactó fue Backdoor, el final de la ola es impresionantemente bajo con unos corales que no querés conocer. Rompí la quilla mientras estaba en la ola, así de bajo...
5. Los golpes
Palo, palo, la verdad que en los días más grandes siempre tienes sacudidas a las que en Uruguay no estamos acostumbrados. Pero siempre pueden ser peores. Por suerte volví solo con raspones en los pies y algunos en la mano.
6. Las tablas
Estaba más o menos equipado a la hora de partir... pero la idea era llegar y conseguir algo ahí, las tablas de allá, acá no existen y los precios son bastante mejores.
7. Hawaii es diferente
¡Diferencias encontré varias! Tamaño, riesgo, velocidad... una vez ahí, es como empezar a surcar de nuevo, lleva su tiempo acostumbrarse.
8. ¿Un lugar para vivir?
Mmm, viviría un par de años, no más. El lugar es increíble, sus olas también, pero me pareció muy diferente el estilo de vida que llevan al que me gustaría vivir en un futuro.
9. Hawaii en tu vida
¡Entra en el top 3 de los lugares que pude visitar seguro! Un viaje cargado de momentos inolvidables la gran mayoría del tiempo. Quiero agradecer a Rex Punta del Este por el apoyo que me dieron.
10. Una palabra hawaiana:
ALOHA!
Acerca de los comentarios
Hemos reformulado nuestra manera de mostrar comentarios, agregando tecnología de forma de que cada lector pueda decidir qué comentarios se le mostrarán en base a la valoración que tengan estos por parte de la comunidad. AMPLIAREsto es para poder mejorar el intercambio entre los usuarios y que sea un lugar que respete las normas de convivencia.
A su vez, habilitamos la casilla reportarcomentario@montevideo.com.uy, para que los lectores puedan reportar comentarios que consideren fuera de lugar y que rompan las normas de convivencia.
Si querés leerlo hacé clic aquí[+]